Diez formas de empezar a tomar el control

10 Façons pour commencer à prendre le contrôle

A primera vista, parecería que el pensamiento positivo y el trastorno por déficit de atención (TDA) no tienen nada que ver entre sí. Pero muchos de nosotros desarrollamos patrones de pensamiento negativos porque nos sentimos frustrados por los desafíos que enfrentamos y el frecuente sentimiento de estar abrumados. Esta perspectiva negativa hace que nos resulte aún más difícil gestionar estos desafíos y avanzar.

Practicar el pensamiento positivo permite a las personas con TDA concentrarse en sus fortalezas y logros, lo que aumenta su felicidad y motivación. Esto nos permite dedicar más tiempo a progresar y menos tiempo a sentirnos deprimidos y estancados. Los siguientes consejos brindan sugerencias prácticas que puede utilizar para adoptar patrones de pensamiento más positivos:

1. Cuídate mucho

Es mucho más fácil ser positivo cuando se come bien, se hace ejercicio y se descansa lo suficiente.

2. Recuerda las cosas por las que estás agradecido

El estrés y los desafíos no parecen tan malos cuando constantemente te recuerdan las cosas que están bien en la vida. Tomarse sólo 60 segundos al día para detenerse y apreciar las cosas buenas marcará una gran diferencia.

3. Busque pruebas en lugar de hacer suposiciones

El miedo a no gustar o no ser aceptado a veces nos lleva a suponer que sabemos lo que piensan los demás, pero nuestros miedos normalmente no son la realidad. Si te preocupa que el mal humor de un amigo o familiar se deba a algo que hayas hecho, o que tus compañeros de trabajo estén chismeando en secreto sobre ti cuando les das la espalda, habla y pregúntales. No pierda el tiempo preocupándose por haber hecho algo mal a menos que tenga pruebas de que hay motivos de preocupación.

4. Abstenerse de utilizar absolutos

¿Alguna vez le has dicho a tu pareja: “¡SIEMPRE llegas tarde!” o alguna vez te has quejado con un amigo: «¡NUNCA me llamas! Pensar y hablar en términos absolutos como «siempre» y «nunca» hace que la situación parezca peor de lo que es y programa tu cerebro para creer que algunas personas son incapaces de mantenerte sus promesas.

5. Aléjate de los pensamientos negativos

Tus pensamientos no pueden tener poder sobre ti si no los juzgas. Si notas que tienes un pensamiento negativo, aléjate de él, sé testigo de él y no lo sigas.

6. Aplastar a las “HORMIGAS”.

En su libro “Cambia tu cerebro, cambia tu vida”, el Dr. Daniel Amen habla sobre “ANT” – Pensamientos negativos automáticos. Estos son los malos pensamientos que suelen ser reaccionarios, como «Esta gente se está riendo, deben estar hablando de mí», o «¿El jefe quiere verme? ¡Eso debe ser malo!». Cuando notes estos pensamientos, date cuenta de que no son más que HORMIGAS y ¡aplastalas!

7. Practica amar, tocar y abrazar (a tus amigos y familiares)

No hace falta ser un experto para conocer los beneficios de un buen abrazo. El contacto físico positivo con amigos, seres queridos e incluso mascotas es un consuelo instantáneo. Un estudio sobre este tema demostró que una camarera tocó el brazo de algunos de sus clientes cuando les entregó la cuenta. ¡Estos clientes le dieron propinas más altas que las que ella no recibió!

8. Incrementa tu actividad social

Al aumentar la actividad social, disminuye la soledad. Rodéate de gente sana y feliz, ¡y su energía positiva te afectará de manera positiva!

9. Ser voluntario de una organización o ayudar a otra persona.

Todos se sienten bien después de ayudar. Puedes donar tu tiempo, dinero o recursos. Cuanta más energía positiva pongas en el mundo, más recibirás a cambio.

10. Utilice interrupciones rutinarias para combatir la rumiación.

Si te encuentras reflexionando, una buena forma de detenerlo es interrumpir el patrón y obligarte a hacer algo completamente diferente. La rumia es como concentrarse demasiado en algo negativo. Nunca es productivo, porque no es racional ni está orientado a soluciones, es simplemente una preocupación excesiva. Intente cambiar su entorno físico: salga a caminar o siéntese al aire libre. También puedes llamar a un amigo, coger un libro o poner música.